Los expertos consultados coinciden en que la mejor
recomendación es seguir una dieta equilibrada. "No se trata de consumir el
mayor número posible de antioxidantes, sino que se ha de tomar la cantidad
adecuada a cada situación, ya que el exceso de vitaminas también puede ser
perjudicial. Además, conviene llevar una vida moderadamente activa, evitar fumar,
el estrés o la contaminación ambiental, así como la sobre-exposición
solar", comenta el profesor Bittor Rodríguez, profesor de Nutrición y
Bromatología de la Universidad del País Vasco.
Una fuente esencial de antioxidantes son las frutas y las
verduras. Está demostrado que su consumo es beneficioso para la salud. Según
Michael Ristow, profesor de Nutrición Humana de la Universidad de Jena
(Alemania), "es un error pensar que estos alimentos son buenos sólo porque
tienen antioxidantes; contienen centenares de otros ingredientes que son
esenciales para prevenir multitud de enfermedades". Esos otros elementos
no se encuentran en las pastillas de vitaminas.
Una dieta equilibrada supondría ingerir al día unas cinco
raciones de frutas, hortalizas y verduras, sobre todo frescas. También incluye
entre tres y cuatro raciones de pescado a la semana, dos o tres de carne,
legumbres, lácteos y cereales.
Fuente:
consumer.es./ wikipedia.es/elmundo.es