Los mitos sobre alimentación condicionan los hábitos
nutricionales de muchas personas y pueden influir de forma decisiva en su
salud. El mito alimentario se presenta muchas veces como resto de un pasado de
ignorancia, pero también es debido a creencias erróneas fomentadas por
intereses comerciales, económicos y por una publicidad tendenciosa. La
población está bombardeada por toda clase de opiniones infundadas y
contradictorias y se encuentra en un lamentable estado de confusión, que le
impide distinguir la realidad de la fantasía.
Para ello,
analizaremos diferentes afirmaciones con el objetivo de verificar o rebatir las
afirmaciones (sean ciertas o no) y justificándolas en todo caso.
Para freír es mejor
utilizar el aceite de oliva. El aceite de oliva soporta mejor las altas
temperaturas, y al freírse sus ácidos grasos monoinsaturados no se oxidan,
resultando más saludable.
La margarina es más
saludable que la mantequilla. Aunque la margarina sea una grasa vegetal (y la
mantequilla una animal), en el proceso de solidificación de las grasas
vegetales de la margarina, se producen hidrogenaciones que modifican la
estructura de estas grasas, transformándola en grasas “trans”-saturadas que
perjudican la salud.
Normalmente la gran
mayoría de pacientes obesos no tienen ningún problema hormonal.
El estreñimiento no
tiene influencia sobre el peso.
Comer rápido no
influye en el peso, lo que suele ocurrir es que ingerimos más cantidad de
alimento.
La sal engorda: La
sal es un mineral y no tiene calorías. Puede retener líquidos en pacientes con
insuficiencia cardíaca, renal o hepática, pero en personas normales no influye
en el peso.
El agua con las
comidas engorda: El agua no tiene calorías y por lo tanto no engorda aunque se
tome antes, durante o después de las comidas. Beber agua antes de comer aporta
sensación de saciedad, por lo que puede ayudar a calmar el apetito y a moderar
lo que se come.
Comer solo fruta
durante un día entero adelgaza: Comer sólo fruta o disminuir la ingesta de
alimentos durante un día, no hace perder grasa. Al tomar exclusivamente fruta
durante un día, aportas a tu organismo una buena dosis de vitaminas, minerales,
fibra y antioxidantes, pero no de proteínas, hidratos de carbono y grasa.
El pan, las pastas y
las patatas engordan: El pan, al igual que las pastas, patatas y otros
tubérculos, es rico en hidratos de carbono, el nutriente que nuestro organismo
necesita en mayor cantidad, y además apenas contienen grasa. Lo que aumenta las
calorías de la dieta es la mantequilla, los embutidos, las salsas de nata y
queso, que se añaden en la preparación de los diferentes platos, ya que estos
alimentos son ricos en grasas y aportan gran cantidad de calorías.
El pan tostado, los
colines, la corteza de pan, tienen las mismas calorías que la miga del pan.
El aceite crudo no
engorda: El aceite, sea de oliva o de semillas, aporta las mismas calorías
tanto si está crudo como cocinado, exactamente 9 calorías por cada gramo, lo
que supone aproximadamente unas 100 calorías por cucharada.
Hay aceites que son más “lights” que otros. No es cierto,
todos los aceites contienen las mismas calorías (9Kcal/gr).
Los alimentos con
grasas vegetales son más sanos. Muchos productos indican en sus etiquetas que
contienen “grasas o aceites vegetales”, lo que puede llegar a confundir al
consumidor porque se asocian con grasas que tienen un beneficio para la salud.
Se puede creer que contiene aceite de oliva o de girasol, pero en la mayoría de
los casos contienen grasas saturadas procedentes del aceite de coco y de palma
y que son perjudiciales para la salud cardiovascular, ya que tienen la
capacidad de aumentar los niveles de colesterol sanguíneo.
La fruta después de
comer engorda: El orden en que se comen los alimentos no influye en su
capacidad de engordar, lo que cuenta es el total de calorías diarias. Una fruta
aporta las mismas calorías antes o después de las comidas. El tomar agua antes
de las comidas o tomar la fruta al principio de la comida da sensación de
saciedad, por su alto contenido en agua y fibra, y puede ayudar a comer menos
de otros alimentos.
El plátano engorda:
El plátano, las uvas e higos, aportan más calorías por 100 gramos que las otras
frutas como la manzana, la naranja, la pera, las fresas, el melocotón, etc. Por
tanto, solo hay que tomar menos cantidad para que su aporte de energía sea
parecido al de las otras frutas.
El melón no se
aconseja en dietas de adelgazamiento: Es falso que el melón contenga mucho
azúcar. En realidad es al contrario, es de las frutas que contiene menos
azúcares
Todas las verduras se
pueden comer en cantidad libre bajo una dieta de adelgazamiento. Hay ciertas
verduras (tomate, remolacha, …) en las que hay que controlar su cantidad debido
a su mayor aporte en hidratos de carbono.
Los huevos crudos
alimentan más que los cocinados. En realidad es al revés, ya que el huevo crudo
se digiere menos que el cocido, dado que en estado líquido la clara resiste la
acción de los jugos digestivos yse utiliza tan sólo en un 50%, por el
contrario, cuando está coagulada por el calor, se digiere en un 92%.
Los embutidos de
pollo engordan menos que los de cerdo. Es falso, ya que en los embutidos de
pollo, al igual que en los de cerdo, se añaden grasas, sal y colorantes, con lo
cual se aumenta su valor calórico respecto a la carne normal de pollo.
La carne de cerdo
tiene mucha grasa: La cantidad de grasa depende de la parte del cerdo que consumamos.
Así, el solomillo es la parte menos grasa, el lomo contiene un poco más, y la
parte más grasa son las costillas. Además, la grasa de cerdo generalmente es
visible por lo que es bastante fácil eliminarla.
Aceitunas, aguacates
y frutos secos tienen mucha grasa: Aunque estos alimentos son ricos en grasa,
el tipo de grasa que contienen es insaturada, también llamada grasa buena. Por
ello, forman parte de una dieta equilibrada y no tienen porque ser eliminados.
En un plan de adelgazamiento habría que limitar su cantidad y tomarlos de
manera alterna (cada día alguno de ellos).
Los guisos son platos
con mucha grasa: La cantidad de grasa y calorías que contiene un guiso o
estofado depende de la cantidad de aceite y del tipo de alimentos que se
utilicen.
El hierro de las
legumbres es equivalente al hierro que contienen las carnes. Las legumbres
contienen hierro, calcio y fitatos. Éstos últimos, son los que dificultan la
absorción del hierro por parte del organismo. Asimilamos mucho mejor el hierro
de las carnes.
Los fritos engordan
mucho: Al freír los alimentos, esos absorben bastante grasa. Es recomendable
usar poco aceite, preferentemente aceite de oliva, que el aceite esté bien
caliente pero sin llegar a humear y poner el alimento frito en papel de cocina
para que absorba el exceso de grasa. A pesar de esto, los alimentos fritos
siguen teniendo más grasa que los preparados a la plancha, al horno o al vapor.
El gas de los
refrescos engorda: Las calorías de los refrescos proceden del azúcar, no del
gas que contienen. Una lata (33 cl) de refrescos (unas 140 calorías) equivale a
un vaso de agua con 3 o 4 sobres de azúcar. Para evitar calorías extras, se
pueden elegir los refrescos light.
La fruta entera
contiene los mismos nutrientes que el zumo de de frutas: La fruta entera
contiene más fibra que el zumo, con lo cual es muy recomendable en casos de
estreñimiento. Al tomar solo el zumo de la fruta tomamos más cantidad de
azúcares y menos fibra.
La cerveza sin
alcohol no engorda: Aunque no contenga nada de alcohol, la cerveza es una bebida
hecha a base
de hidratos de carbono en forma de glucosa, fructosa y
maltosa. Por tanto aporta las calorías propias de estos nutrientes (entre 40 –
80 kcal/cerveza).
El vino tinto es
mejor que el blanco. El vino tinto, en contraposición con el blanco, contiene
polifenoles con propiedades cardiosaludables y anticancerígenas.
Los alimentos
integrales no engordan: A igual cantidad, los alimentos integrales aportan más
fibra que los refinados, pero su aporte en calorías es muy similar.
Los alimentos light
adelgazan: A los alimentos light se les disminuye la cantidad de azúcares o
grasas para que tenga por lo menos un 30% menos de calorías que el mismo
producto no light. Pero muchos alimentos light necesitan grasas para su elaboración
(bollería light, mayonesa light, papas fritas light o el paté light), siguen
siendo ricos en calorías y por tanto no se puede abusar de ellos y no sirven
para adelgazar.
El queso de Burgos no
contiene nada de grasa. Sólo los quesos desnatados (requesón) y algunos quesos
tipo Quark son realmente bajos en grasa. El queso de Burgos contiene entre un
15-20 % de materia grasa , en cambio, el requesón contiene sólo un 7%.
Para adelgazar es
bueno saltarse comidas: Saltarse las comidas no es un buen hábito, ni la forma
de adelgazar. Es más correcto repartir las calorías diarias en 4 o 5 comidas al
día por 2 razones: Ayuda a no llegar con
excesiva ansiedad a la comida, tras el periodo de ayuno y cada vez que comemos
el cuerpo gasta energía en digerir y asimilar los nutrientes, por lo que se
está consumiendo energía.
Es necesario tomar
suplementos vitamínicos cuando se hace dieta: Falso. Normalmente es suficiente
la cantidad de vitaminas y minerales que se aportan a través de una dieta
variada y equilibrada. No hay evidencias científicas de que el aporte de
vitaminas en personas sanas mejore el cansancio, el apetito, etc. Si no existe
una deficiencia clara, un suplemento de vitaminas sin necesidad no tiene
efectos positivos.
Los alimentos frescos
son más nutritivos que los congelados: Falso. El frío mantiene las cualidades
de los alimentos sin alteración.
El ejercicio físico intenso siempre hace perder peso: Falso.
El ejercicio físico es beneficioso pero no porque provoque pérdidas de peso
importantes sino porque desarrolla el músculo y mejora la calidad de vida. El
mejor ejercicio para perder peso es caminar, bicicleta, natación…durante más de
media hora 3-4 dias a la semana.
Mi metabolismo es muy bajo y por eso engordo: las calorías
que necesita una persona sana van en función de la edad, peso y talla, lo que
se denomina metabolismo basal, por eso cuanto mayor sea su peso mayor será su
metabolismo. Es la masa muscular la que se encarga de quemar calorías, por ello
se recomienda realizar ejercicio físico.
Mi exceso de peso es por la retención de líquidos:
científicamente tanto el sobrepeso como la obesidad se caracteriza por un
exceso de grasa corporal y no de líquidos. Por eso se aconseja no usar
indiscriminadamente diuréticos sin control de un especialista ya que puede ser
perjudicial para la salud.
Los nervios me engordan: el aumento de peso lo origina una
ingesta excesiva de alimentos de alto contenido energético que se ve favorecida
en determinados estados de nerviosismo o de ansiedad en determinadas personas.